2 Junio, 1986
Sr. Clever, por
medio de mi rector de la Universidad Fr. Navarrate yo recibí su
carta del 23 de marzo de este año. A su pregunta puedo contestar
lo seguiente:
La esmeralda con
el retrato de Cristo (semejante a su foto) fué dada por el Sultan
Bajazid II al Papa Inocente VIII ( + 1492). La Esmeralda desapareció
probablemente con la invación de Roma en (1527). Pero la misma imagen
del perfil de Cristo aparece en medallas papales, como en la del Papa Julius
III. También existen pinturas de la escuela flamenco. Usted encontrará
la ilustración de tal pintura e información adicional en:
Pauline Hinze, Deus Homo, Vol. I, Evangelische Verlagsanstalt Berlin (Eastern
Germany), Berlin 1973, fig. 8, page 28 f.
Sinceramente ,
Fr. Heinrich Pfeiffer, S.J.
Pontifical Universita Gregoriana
00187 Roma - Piazza Della Pilotta, 4
Entonces, este retrato podría facilmente
ser el de Jesús. Sin duda, fué pintada sin las contusiones
y cortadas que nosotros sabemos que el recibió porque Isaias dijo:"
Muchos se asombrarán de él, al ver su semblante desfigurado,
hasta perder toda apariencia humana.(Isaías 52:14).
¿Es realmente importante
que nosotros sepamos como era Jesús? ¡No! Yo no lo creo. Sabemos
que El fué perforado por nosotros, y El soportará las cicatrices
en manos, pies y el costado. La luz radiante estará destellando
de esas cicatrices cuando El vuelva a la tierra, como fué visto
por el profeta Habacuc en la visión:" Dios viene de Temán,
y el Santo [Jesús] del Monte de Parán. Su gloria cubre los
cielos, y la tierra se llena de Su alabanza. El resplandor es como la luz
del sol. Rayos brillantes salen de su mano, allí está escondido
su poder.(Ibib., 3:3,5).
Nosotros no necesitamos una pintura para representar las manos de Jesús irradiando destellos -- esto es obvio para todos. Y esas manos perforadas dicen la historia más importante de Su magnífico sacrificio. Es esencial que sepamos el mérito de Su enmienda sacrificatoria, y el cambio de poder en la vida de Su resurrección en nuestras vidas. Si Cristo mora en nuestros corazones, entonces también reconoceremos Su voz mientras nos nutre y nos guía en este camino de la tierra a través del portón estrecho al cielo. Jesús habló estas palabras para enfatizar ese mismo pensamiento: "Mis ovejas oyen mi voz, yo las conozco, y ellas me siguen. Yo les doy vida eterna, y jamás perecerán, ni nadie [ hombre] las arrebatará de mi mano." (Juan 10:27,28).
¿Que hay sobre estas marcas perforadas? ¿Y qué acontecerá cuándo Jesús regrese? ¿Qué son esos números misteriosos 1290 y 1335 que sólo podían ser entendidos a final del tiempo? ¿La marca de la bestia -666? ¿Quién es el Anticristo? Estas preguntas y muchas más están contestadas en nuestras páginas de Web bajo el título de , El Sabio Entenderá. Usted está invitado a leer este material el cuál es conectado a nuestra página de hogar. Por favor visítenos. Carlos and Tish Clever.
Carlos H. Clever, 1998, todos derechos del autor reservados.